El asambleísta Charles D. Lavine (D-Glen Cove) anunció que ayudó a aprobar una legislación importante para asegurar que los estudiantes vayan de ida y vuelta a la escuela de manera segura (A.4950-A).

“Ningún padre debería de tener que preocuparse por la seguridad de su hijo al ir y regresar de la escuela”, dijo el asambleísta Lavine. “Sin embargo, hay demasiados conductores en las carreteras que se preocupan más por llegar al destino al que necesitan ir que por detenerse por un estudiante que está cruzando la calle. Al colocar cámaras en los autobuses escolares y en toda la ciudad, salvaremos vidas y nos aseguraremos de no permitir que los conductores imprudentes se salgan con la suya”.

La legislación de la Asamblea permitiría que las localidades implementen un sistema de monitoreo de violaciones con foto en los autobuses escolares. Actualmente, los conductores que se pasan ilegalmente a un autobús escolar que está detenido mientras tiene las luces rojas encendidas solamente pueden recibir una multa por parte de un oficial de la policía que presenció la violación. Este nuevo programa permitiría que las localidades instalen cámaras en los autobuses escolares al igual que cámaras permanentes y expidan multas a los conductores que se pasen ilegalmente.

Todos los días, un promedio de 50,000 conductores se pasan ilegalmente a los autobuses escolares en Nueva York[^1]. Estos conductores necesitan saber que van a tener que pagar un precio por actuar de una manera tan negligente y poner en riesgo las vidas de nuestros niños, afirmó el asambleísta Lavine.

Para continuar ayudando a asegurar que nuestros niños vayan a la escuela de la manera más segura posible, el asambleísta Lavine luchó por y para que se aprobara una legislación para implementar el programa piloto de cámaras de velocidad en las zonas escolares de la ciudad de Buffalo (A.951). A la ciudad se le permitiría operar las cámaras de velocidad hasta en 20 zonas escolares.

“Programas como éste trabajan –le brindan a las familias tranquilidad, hacen que los conductores piensen dos veces sobre manejar a exceso de velocidad y responsabilizar a los que no siguen las reglas”, dijo el asambleísta Lavine. “Esta legislación ayudará a mantener a los niños de Buffalo seguros”.

La efectividad de programas como estos en la ciudad de Nueva York ha sido clara. Del 2014 al 2017, el exceso de velocidad durante las horas escolares disminuyó por un 63 por ciento en las zonas escolares monitoreadas por cámaras de la ciudad^[2]. En combinación con los reductores de velocidad, señalización adicional e iniciativas de educación pública, actualmente, las cámaras escolares pueden cambiar el comportamiento de un conductor –incluso fuera de las horas de funcionamiento de las cámaras^[3].

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[1] safeny.ny.gov/opsafstp.htm

[2] nyc.gov/html/dot/downloads/pdf/speed-camera-report-june2018.pdf

[3] Ibid.